La Policía Local reconoce un incremento de la actividad delictiva entre menores vinculados al instituto de Orihuela Costa

La Policía Local reconoce un incremento de la actividad delictiva entre menores vinculados al instituto de Orihuela Costa

Martes, 3 de diciembre 2024, 11:56

El comisario jefe de la Policía Local, José María Pomares, admite un incremento de la criminalidad entre menores vinculados al instituto de Orihuela Costa. Así lo ratifica en un informe que el funcionario ha trasladado a los representantes vecinales pertenecientes a las dos juntas de distrito en las que está dividido el litoral oriolano.

La intervención de Pomares, que no acudió presencialmente a la reunión celebrada en la sede del Ayuntamiento en la costa, fue solicitada por uno de los representantes vecinales, en concreto, el presidente de AIDOC, Luis Carcedo. El documento suscrito por el comisario fue leído de viva voz ante los presentes en la reunión por el concejal de la Costa y presidente de las Juntas de Distrito X y XI, Manuel Mestre (Vox).

El activista vecinal y exresponsable de Cáritas en Orihuela Costa preguntaba sobre 11 cuestiones diferentes al comisario. La primera de ellas era por la inquietud vecinal ante lo que observan como un incremento de la actividad delictiva en Orihuela Costa. Pomares, por contra, suscribe que «según los datos registrados, el número de casos atendidos por los agentes no ha experimentado un incremento significativo en los últimos meses/años».

En este sentido, el máximo responsable en materia policial del municipio reivindicó que se ha reforzado la presencia de patrullas en las zonas de mayor incidencia de delitos, así como se han realizado campañas y se han coordinado actuaciones con asociaciones vecinales.

Más Guardia Civil

Aun así, Pomares apostilla que, para mejorar la situación, es preciso una mayor implicación y presencia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. «Es competencia directa de la Guardia Civil el control directo de la delincuencia, siendo la Policía Local únicamente colaborador de ellos. Es necesario que se aumente el número de patrullas de la Guardia Civil, pues son escasos».

Hecha dicha apreciación, Pomares, a preguntas de Carcedo, reconoce que el IES Playa Flamenca se ha convertido en un ‘punto caliente’ para los agentes. «Se ha experimentado un incremento de incidentes relacionados con menores en el centro. Este diagnóstico se ha realizado en coordinación del equipo directivo y la unidad de menores de esta policía»

A este respecto, Pomares defiende que se ha incrementado la presencia policial en el inmediaciones del IES Playa Flamenca y que señala que se está colaborando con servicios sociales para abordar «casos críticos». Un extremo que este periódico ha podido comprobar ‘in situ’. Desde el AMPA, los padres corroboran que, desde hace un mes aproximadamente, la presencia de agentes en las entradas y salidas del centro para evitar altercados es periódica.

Tráfico de drogas

En la misma línea, Pomares incide en que «los análisis confirman un incremento de las conductas delictivas en jóvenes de entre 14 y 18 años» y señala que los principales casos incluyen agresiones y reyertas. Casos a los que se suma el tráfico de drogas. «Se ha identificado como uno de los puntos de mayor incidencia el IES Playa Flamenca y sus inmediaciones, así como el centro comercial y zonas de ocio, concretamente, donde existen los denominados clubs de fumadores».

Las apreciaciones del comisario vienen a confirmar lo denunciado ya por AMPAS como la Gabriel Celaya. Portavoces de los padres del IES Playa Flamenca vienen meses denunciando un éxodo de estudiantes del único instituto de Orihuela Costa y un miedo creciente entre ellos a que sus hijos permanezcan en este centro educativo, a donde van a parar todos aquellos adolescentes cuyos padres no pueden permitirse llevarlos a un centro privado o matricularlos en centros públicos de localidades vecinas como Torrevieja o Pilar de la Horadada.

Desde la AMPA Gabriel Celaya describen que la situación interna del centro educativo está marcada por frecuentes riñas, peleas y amenazas entre menores. Señalan que una estudiante incluso llegó a acabar en el hospital por las heridas que sufrió en uno de esos enfrentamientos. Este periódico intentó contrastar sin éxito todos estos extremos con la dirección del centro educativo.

Fármacos

Unas conductas que, según el AMPA, se desplazan fuera de las aulas a las inmediaciones del instituto, donde jóvenes aprovechan viviendas abandonadas y okupadas como las de la calle Nutria, por ejemplo, para consumir sustancias estupefacientes con las que también trafican y con las que tratan de captar a otros menores. Incluso, reconocen fuentes consultadas por este periódico, se ha llegado a detectar por parte de la Policía Local el tráfico de medicamentos antidepresivos y analgésicos sustitutivos de algunas drogas más comercializadas. Algo que preocupa sobremanera al desconocerse la procedencia de dichos fármacos.

En su informe, Pomares rechazó ofrecer detalles a Carcedo sobre el número de patrullas y agentes destinados por turno, entendiendo que no procedía ofrecer dicha información. Algo que Mestre, como concejal de la Costa, comprendió que era una información que «los malos» no debían conocer.

36 agentes fijos para la costa

Algunos vecinos, a este respecto, comprendieron que sí que no era necesario saber las patrullas destinadas por turno, pero sí exigían conocer el número total de agentes del cuerpo municipal destinados a la costa. Algo de lo que, por otra parte, ya dio cuenta en el pleno del pasado febrero la concejal de Seguridad Ciudadana, Mónica Pastor (PP), a preguntas de Unidos por la Costa (antes Asociación de Vecinos de Cabo Roig y Lomas).

En aquella sesión, la edil responsable de la Policía Local detalló que 36 de los 156 agentes que conforman la Policía Local de Orihuela tienen destino en la costa frente a los 32 agentes que patrullan el centro y los 31 que lo hacen en pedanías. Asimismo, informó de que los efectivos restantes los conforman 13 agentes que trabajan para todo el término municipal desde las oficinas (con funciones en materia de menores, atestados o depósitos) y 23 policías más que son itinerantes y se envían a aquellos destinos que precisen un refuerzo.

Carcedo, por su parte, defendió que su escrito y preguntas no están basadas en meras sensaciones subjetivas y aseguró que esa información ha sido contrastada con medios policiales y sociales a su alcance. Todos los presentes en la Junta de Distrito coincidieron asimismo en subrayar la creciente preocupación por el incremento de la delincuencia entre jóvenes y en torno al instituto.

Refuerzos de personal

Por su parte, Luisa Boné, edil de Cs y una de las representantes de la oposición en la Junta de Distrito, concedió al equipo de gobierno PP-Vox que, a su juicio, sí está haciendo un esfuerzo en reforzar el número de agentes de la Policía Local. La concejal naranja señaló en ese sentido que, mientras ella ostentó la cartera de Recursos Humanos, se priorizó la contratación de agentes y que, según su parecer, el actual gobierno municipal está siguiendo la misma línea.

123 multas en la costa para aparcar indebidamente en minusválidos

Carcedo, además, cuestionaba a Pomares por las dificultades que encuentran para desplazarse las personas con movilidad reducida. Más allá del deficiente estado y escasa o nula adaptación de muchas aceras, el presidente de AIDOC denuncia que es frecuente el estacionamiento indebido en plazas de minusválidos y el uso de tarjetas habilitantes falsas.

A este respecto, Pomares detalló que la Policía Local ha impuesto en lo que va de año 246 sanciones por estacionamiento indebido en plazas de minusválidos, de las cuales 123 han sido en Orihuela Costa. Asimismo, reivindicar que los agentes están revisando las tarjetas de estacionamiento y que se están adaptando todos los espacios disponibles para aparcamiento a la legislación vigente.

Pomares asimismo sostuvo que el tiempo medio de respuesta ante cualquier ciudadano con discapacidad es de 5 a 10 minutos. Una respuesta que enfado especialmente a Carcedo, que relató un caso personal en el que dijo que se tardó una hora y 45 minutos en atender a una persona con discapacidad que había sufrido una caída en la vía pública.

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