Jiménez Bosque ofrece 10 millones por el Cartagena, y Moreno y Belmonte exigen 14

Domingo, 29 de diciembre 2024, 07:44

| Actualizado 11:00h.

Ahora sí, la posibilidad de que Miguel Ángel Jiménez Bosque (Cartagena, 50 años) compre el FC Cartagena comienza a tomar cuerpo. Después de una primera toma de contacto informal, a través de un mensaje de WhatsApp que llegó al teléfono de Paco Belmonte el pasado 5 de diciembre y que entonces quedó en nada, el propietario de Jimbo Fresh y presidente del Jimbee FS Cartagena está dispuesto a sentarse esta misma semana en una mesa de negociación con el todavía presidente del Efesé y hacer una oferta formal por el club. La reunión, que iba a celebrarse el pasado viernes y tuvo que ser aplazada por motivos de agenda de Jiménez Bosque, tendrá lugar este jueves 2 de enero.

Fuentes cercanas al empresario cartagenero indicaron a LA VERDAD que está dipuesto a pagar 10 millones de euros por quedarse con el 100% de las acciones de la SAD albinegra. Esas mismas fuentes añadieron que, por el momento, Felipe Moreno y Belmonte exigen 14 millones para vender una entidad que tiene una deuda a corto plazo de 1,8 millones y una ciudad deportiva por terminar en La Manga Club, sin saberse muy bien en qué se ha gastado el dinero del Plan Impulso (6 millones de euros del fondo CVC) y qué cantidad se ha destinado realmente a hacer obras en las instalaciones del resort de Los Belones.

En aquel mensaje a Belmonte del 5 de diciembre, enviado a petición de Jiménez Bosque por el concejal de Deportes, José Martínez, la oferta era de 7 millones de euros y la cantidad que pedía Belmonte ascendía a 16,2. Transcurrido prácticamente un mes desde entonces, las posturas se han acercado ligeramente. Pero aún hay mucha diferencia entre lo que pide el vendedor y lo que ofrece el comprador. La idea es crear un clima de confianza propicio entre todos y lograr que la operación pueda encarrilarse en los próximos días.

Siete años sin relación

Es importante recordar que Belmonte y Jiménez Bosque no se hablan desde hace siete años, que son los que lleva el segundo sin pisar el palco del Cartagonova. Fue un asiduo a esa zona noble y uno de los principales patrocinadores del Efesé en los dos primeros años de Belmonte como presidente albinegro. Pero rompieron relaciones cuando Jiménez Bosque quiso entrar en el accionariado del club aportando una cantidad que rondaba los 200.000 euros y Belmonte se negó de manera rotunda. Jiménez Bosque se centró entonces en el fútbol sala y nunca más colaboraron. Ni se dirigieron la palabra.

Ahora, una vez confirmado que el interés de Enrique Martí, Javier Recio y Rafa Cascallana ha quedado en nada y que la vía de Daniel Núñez ni siquiera puede ser considerada, por motivos más que evidentes sabiendo cómo acabaron sus proyectos en el Mar Menor y en el Racing Cartagena, la sensación que flota en el ambiente es que Belmonte y Jiménez Bosque están condenados a entenderse y, por tanto, deberán aparcar sus diferencias, en aras del bien común. Sobre todo, porque esta operación es la única que convence al Gobierno local, que a su vez es el principal sostén del FC Cartagena, al margen de LaLiga y su dinero en concepto de derechos televisivos.

De hecho, la alcaldesa, Noelia Arroyo, también está moviéndose de una manera discreta y está actuando como mediadora. Tiene una gran relación personal con los presidentes del Efesé y del Jimbee y está poniendo de su parte para que la compraventa del Efesé sea un éxito. Sería la mejor salida para Paco Belmonte, cuyo proyecto en Cartagena está completamente agotado. Y la entrada de un empresario como Jiménez Bosque, cartagenero y cartagenerista, gusta a la práctica totalidad de los 9.000 abonados del conjunto blanquinegro. El futuro del FC Cartagena está en juego y la alcaldesa ha pedido altura de miras a Belmonte y Jiménez Bosque. Es urgente que antepongan el bien común y olviden sus diferencias durante las próximas semanas. Solo así acabará llegándose a un acuerdo beneficioso para todos.

«Somos meloneros y especialistas en melones. El fútbol nos gusta, pero sabemos lo justo de él. Yo soy del Efesé desde que era un crío y apoyo porque quiero y ahora puedo. Igual en un futuro podemos entrar en el consejo de administración. El tiempo dirá. Pero a día de hoy no hay nada de nada». Son palabras de Jiménez Bosque. Las pronunció en octubre de 2017, unos meses antes de su frustrada entrada en el Efesé.

Hace dos meses, preguntado por la posibilidad de que ahora hubiese llegado su momento en el fútbol local, negó cualquier tipo de interés en adquirir el Efesé. «No estoy interesado en comprar el Cartagena. Estamos enfocados en nuestro proyecto de fútbol sala», dijo en una tertulia en ‘Efesista’. Sin embargo, por su cabeza ya empezaba a rondar la idea de dar un paso adelante y postularse. Y, de hecho, ha confesado a sus colaboradores más cercanos que va a poner toda la carne en el asador para cumplir su sueño de ser presidente del FC Cartagena.

Presión a Moreno

En el entorno de Jiménez Bosque están poniendo estos días todo el foco en la figura de Felipe Moreno, persona clave en esta operación puesto que el 85% de las acciones del FC Cartagena le pertenecen. El dueño de Jimbee no se ha reunido todavía con el presidente del Real Murcia, quien a su vez es la persona que controla Duino Inversiones a través de su colaborador Fernando Carreño. Pero fuentes de la negociación consultadas por este periódico señalan que Jiménez Bosque acusa a Moreno de «frenar adrede» su entrada en el Efesé, con el fin de estrangular económicamente el proyecto albinegro y dejarlo caer a Primera Federación.

Añaden estas fuentes que ningún otro empresario va a venir con los 10 millones de euros que pone en estos momentos Jiménez Bosque para quedarse con un club muy tocado en lo deportivo, lo económico y lo institucional. En cualquier caso, Moreno debería ser el primer interesado en vender, primero por recuperar el dinero que puso en el Cartagena y, después, porque su presencia en el Efesé dejó de tener sentido en el momento en el que compró el Real Murcia.

Personas que están cerca de la negociación entre Miguel Ángel Jiménez Bosque y Paco Belmonte, y que recientemente han tenido acceso parcial a las cuentas del club, confirmaron a LA VERDAD que el dinero aportado por Felipe Moreno al FC Cartagena entre 2015 y 2022, a través de Duino Inversiones, roza los 5 millones de euros. En concreto, son 4,8 millones. No obstante, otras fuentes cercanas al club albinegro rebajan esa aportación a 3,2 millones.

Sea como fuere, la intención de Moreno es recuperar todo ese dinero y hacerlo con intereses de demora. No está dispuesto a perder capital en la compraventa del FC Cartagena y está por ver cómo gestiona el fin de su relación con Paco Belmonte. Lo que se conoce es que el 85% del club es de Moreno y el 15% pertenece a Belmonte, pero nadie sabe qué tipo de acuerdo tienen firmado ambos en el ámbito privado. Y por ahí se pueden explicar muchas de las cosas que han sucedido en el Efesé desde que Moreno compró el Real Murcia. Eso fue en marzo de 2023 y, desde entonces, el exdueño del Leganés ha inyectado 16 millones de euros en la entidad grana.

Jansson, la última ayuda

La aportación de Moreno al Cartagena, que fue constante desde la llegada de Belmonte y Breis en 2015, terminó en el verano de 2022. Lo último que puso el empresario cordobés fueron los 254.000 euros que hubo que abonar al Kalmar FF por los derechos de formación del joven extremo sueco Isak Jansson. Antes, en noviembre de 2019, había desembolsado más de 300.000 euros para traer al Cartagena al panameño Adalberto Carrasquilla.

Eso es pasado. La última auditoría de cuentas realizada en el FC Cartagena, con fecha de 30 de marzo de 2024, revela «dudas significativas sobre la capacidad de la sociedad para continuar como empresa en funcionamiento». Según este documento, la entidad albinegra necesita una inyección económica «urgente», para «cubrir esta incertidumbre» actual a la mayor brevedad. Y ese dinero no lo va a poner Moreno. Ni Belmonte. ¿Lo pondrá Jiménez Bosque?

Los hermanos Jiménez Bosque (Miguel Ángel y Sergio) fundaron hace 14 años Jimbo Fresh, con sedes repartidas entre La Puebla (Cartagena), La Unión y Mazarrón y lograron situar en un tiempo récord a su empresa en el ‘Top 20’ del sector agrícola de la Región de Murcia, con innovadores procesos de producción y comercialización de melón. Jimbo Fresh ocupa el puesto 139º en el ranking de compañías más importantes de la provincia de Murcia. Su facturación en 2022 fue de 56,5 millones de euros y el 95% de su venta está en el mercado extranjero.

Así, Jimbo Fresh podría no invertir ni un solo céntimo en publicidad. No necesita promocionar sus melones porque sus consumidores están a miles de kilómetros de aquí. Pero desde 2015 Jiménez Bosque se ha convertido en unos de los grandes mecenas del deporte cartagenero.

El pasado verano se cerró un acuerdo con un fondo de inversión canadiense, que prometió pagar un dinero antes del 10 de agosto para quedarse con el Cartagena. Pero la fecha llegó y el dinero nunca apareció. Más tarde comenzaron las negociaciones con Enrique Martí, Javier Recio y Rafa Cascallana y el 1 de octubre se inscribieron en el CSD el 100% de las acciones del Efesé a nombre de Executive Privilege SA, mercantil cuyo administrador único es el empresario valenciano. Sin embargo, tres meses después, Martí no ha puesto ni un céntimo. Estas dos operaciones fallidas se suman a una anterior, ocurrida en la primavera de 2023, cuando hubo conversaciones avanzadas con el argentino Marcelo Figoli, quien no obstante acabó decantándose por el Burgos. El deseo de Paco Belmonte es dejar el club en buenas manos y que el proyecto tenga futuro y continuidad.

William Abrego

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