Lunes, 6 de enero 2025, 22:08
El día que el equipo de un pueblo de 1.300 habitantes salió en los titulares de todo el mundo es una realidad. La Deportiva Minera vivió la jornada más grande su historia, llenó el estadio Cartagonova y le dio a Cartagena el mejor regalo de Reyes posible: la primera visita oficial del Real Madrid a la ciudad. El humilde club de Llano del Beal vivió una tarde ensueño, jugó contra los mejores futbolistas del mundo y no pudo hacer nada para evitar la ‘manita’ de los blancos en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. Solo Fran Martínez, el portero cartagenero, contuvo una goleada mayor.
Cuando los planetas se alinean. Cuando te toca el euromillón. Hay improbables que ocurren una sola vez en la vida y el partido Deportiva Minera-Real Madrid es uno de ellos. El equipo de un pueblo de 1.300 habitantes jugó anoche contra el mayor universo futbolístico del planeta, una multinacional que mueve show, espectáculo, cifras multimillonarias y recluta a jugadores vistos como estrellas del viejo rock and roll. Un club de dimensiones planetarias que agita masas por cada rincón que pisa, ya sea esta semana en Arabia Saudí o ayer por las calles del barrio de Las Seiscientas. Levanta vítores, pasiones y es capaz de arrasar con todo.
Deportiva Minera:
Fran Martínez; Juanmi Heredero (Sheffield, 46), Fran Molina, Monty (Baradji, 46), José Mas; Damián Petcoff; Omar Perdomo, Javi Vera (Sanchís, 77), Cristhian Britos, Pipo (Domi, 62); Francis Ferrón (Sergio Cortado, 61).
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Real Madrid:
Lunin; Lorenzo Aguado (Chema, 63), Asencio, Diego Aguado, Fran García; Valverde (Ceballos, 45), Camavinga (Mbappé, 63), Modric (Lucas Vázquez, 63); Güler, Endrick, Brahim (Vinicius, 63).
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Goles:
0-1, Valverde (minuto 4). 0-2, Camavinga (12). 0-3, Güler (28). 0-4, Modric (54). 0-5, Güler (88). -
Árbitro:
Alberola Rojas (manchego). Amarilla a Juanmi. -
Incidencias:
Lleno en el estadio Cartagonova con 13.392 espectadores. Antes del partido hubo un homenaje a Fulgencio Ortega, presidente de la Minera en la década de los 80 y 90 y abonado número 1. También se entregó una placa conmemorativa al Real Madrid por su primera visita oficial a Cartagena.
Pero la Copa del Rey en concreto, y una pizca de azar en el sorteo, permite que dos clubes a distancias abismales puedan cruzar sus caminos una vez en la vida. La Minera tiene 512 abonados y un presupuesto de 800.000 euros; el Real Madrid es puro marketing en todo el planeta tierra y esta temporada presenta un presupuesto de más de mil millones de euros. El dinero de uno no le daría al otro para pagar ni a un solo futbolista. Pero mineros y merengues se alinearon por una sola noche, por solo noventa minutos que pasarán a la historia del deporte local.
Las fuerzas quedaron igualadas a las siete de la tarde cuando el árbitro manchego Alberola Rojas señaló el inicio del partido. En ese momento toda la burbuja de glamour, vino y rosas que rodeó al partido se quedó en nada. En ese momento eran veintidós jugadores de corto, un balón, un marcador en 0-0 y la obligatoriedad de meter la pelota en el fondo de la portería, sin importar las cuatro diferencias de categoría ni las gigantescas diferencias presupuestarias.
La Minera tuvo que atravesar un desierto sin agua para plantarse en este partido, que nunca jamás sucedió en una ciudad con una tradición futbolística centenaria. Ni el Cartagena en sus muy diversas denominaciones ni ningún otro club de la ciudad fue capaz nunca de medir fuerzas en un partido oficial contra el Real Madrid. Lo logró el humilde club de la diputación de Llano del Beal proclamándose campeón de Tercera División y obrando una doble carambola: ganar en Tudela en una fría noche tras siete horas de autobús y rizar el rizo doblegando al Alavés, aturdido por la marcha del entrenador, los malos resultados y sorprendido por los guerreros de Popi en la tanda de penaltis.
Todo ello más la lotería del sorteo permitió anoche ver al Real Madrid de regreso a la Región de Murcia catorce años después. Y disputar por primera vez un partido de competición oficial en Cartagena tras los trofeos amistosos que jugó a principios del siglo XXI. Demasiado tiempo para una ciudad de 220.000 habitantes que finalmente colgó el cartel de no hay billetes en el Cartagonova.
Con el balón ya a rodar, el encuentro no tuvo mucha más historia ni prácticamente recorrido. Si la goleada blanca pudo ser contenida fue en cierto modo gracias a Fran Martínez. El portero y excanterano del Real Madrid vivió una noche de ensueño y protagonizó paradas de todos los colores, todas correspondidas con la palmadita en la espalda de Brahim y Güler. El cartagenero completó una actuación sobresaliente con paradas de altísimo nivel.
Y ese que el joven guardameta empezó algo nervioso el partido. En la línea general de una Deportiva Minera atenazada, nerviosa, que saltó al terreno de juego cometiendo errores en la salida de balón que pronto pudieron costarle caro. Güler y Endrick (negado en el Cartagonova) perdonaron el 0-1 en el minuto 2. No así Valverde en el 4, en una pérdida fatal de los locales y un peor despeje dentro del área.
Lunin, un espectador más
El Real Madrid juega este jueves la Supercopa de España en Arabia Saudí y no quiso historias, complicaciones ni revivir una de esas negras noches coperas que ensuciaron su expediente en el pasado, como el Toledo en el 2000, el Real Unión de Irún en 2008, el Alcorcón en 2009, el Cádiz con el ‘caso Cheryshev’ en 2025 y el Alcoyano en 2021, entre otros. Esta vez los de Carlo Ancelotti dejaron despachado el encuentro en la primera parte. Un paseíllo al que contribuyeron Camavinga (minuto 12), Güler (28) y solo pudo recortar Fran Martínez bajo palos. En la otra orilla calentó para quitarse el frío Lunin, un espectador más.
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La segunda parte sobró completamente. El partido estaba más que sentenciado. Popi premió a jugadores para llevarse un recuerdo inolvidable y solo el entusiasmado Baradji protagonizó un par de cabalgadas hacia la portería de Lunin, sin concretar ningún disparo a puerta. Con el 0-4 de Modric y más de media hora de juego por delante, Carlo Ancelotti tuvo el detalle de ingresar a sus dos grandes estrellas, Vinicius y Mbappé, con el riesgo de sufrir una lesión. Gran gesto el de Ancelotti con el estadio.
El astro francés protagonizó un par de arrancadas hacia el área y asistió en el doblete de Güler para cerrar una ‘manita’. Ahora vuelve la realidad: el Real Madrid se va Arabia y la Minera juega el domingo contra el Torremolinos.
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Enlace de origen : 'Manita' del Real Madrid en el día más grande de la Minera
