Martes, 14 de enero 2025
La mujer se asoma con cautela por el pequeño ventanuco que se dibuja en el biombo de la sala de vistas y emite un leve sonido que el tribunal apenas acierta a entender. «Por favor, repita lo que ha dicho», le ruega el magistrado a la testigo, que no puede contener el llanto. «Sí», pronuncia ahora alto y claro. «Es él».
La Justicia sienta ya en el banquillo a Patricio M., un joven de 29 años que presuntamente tuvo en vilo a la Región en septiembre de 2022 con sucesivos ataques sexuales a mujeres en la mota del río, en Murcia. La Fiscalía reclama penas que suman cerca de medio siglo de cárcel para este vecino de la pedanía murciana de Javalí Nuevo, al que acusa de agredir a cinco víctimas, llegando a violar a una de ellas. Tres de las afectadas lo reconocieron este martes en el juicio sin ningún género de dudas –faltan dos por comparecer todavía ante el tribunal–. «Se me quedó muy grabado», reconoció una de ellas.
La Audiencia Provincial comenzó este martes el juicio contra este presunto agresor sexual que, por petición del abogado Raúl Noguera, que se encarga de su defensa, comparecerá la semana que viene, al término del juicio. Los magistrados empezaron, por tanto, escuchando los testimonios de tres de las víctimas.
«Iba andando por la mota del río y escuché una moto. Se cruzó en mi camino, parándome en seco. Yo iba tranquila porque era un camino que había hecho miles de veces», rememoró ante los jueces una de las afectadas. «Cuando me sacó el cuchillo yo ya vi al demonio. Me puse muy nerviosa». Esta mujer, muy afectada, explicó que le entregó el móvil al asaltante y que éste la hizo bajarse de la bicicleta en la que iba montada y apagar la luz. «Al principio creía que me iba a robar pero entonces me puso el cuchillo en el cuello y me gritó que le enseñase las tetas». La frase escuchada por esta víctima fue repetida también por las otras dos víctimas que comparecieron este martes ante el tribunal.
«Crucé los brazos y le dije que no, pero me amenazó otra vez con el cuchillo y me dijo que quitase las manos». El agresor, según relató la víctima, llegó entonces a violarla. «Me cogió por detrás y me apretó la boca para que no gritara. Mi pensamiento en ese momento era que me iba a matar», remarcó. «Yo temía mucho por mi vida y le gritaba que tengo un hijo». La mujer consiguió finalmente zafarse del agresor tras decirle que su marido venía andando hacia la zona.
«Se asustó mucho»
La primera de las afectadas en comparecer ante el tribunal también desgranó al detalle el ataque al que Patricio M. presuntamente la sometió en la tarde del 19 de agosto de 2022 cuando salió en bici por la mota del río a la altura de La Arboleda. «Vi una moto parada y pasé junto a ella», explica. «Al ratico me volvió a pasar y lo vi parado otra vez. Fueron como dos o tres veces y yo ya iba nerviosa. No había mucha gente». A la altura de la sede de la empresa Hero, al verlo nuevamente, esta mujer decidió darse la vuelta y cuando regresaba volvió a escuchar la moto.
«Se puso a mi altura y me dijo que parase. Me pegó un tirón del pelo que me llevó al suelo y me dijo que le diera el móvil y la riñonera», relató la testigo. «Me preguntó si tenía más cosas y, al decirle que no, me dijo ‘enséñame las tetas’». Esta víctima consiguió que el acusado huyese al decirle que había avisado antes a la Policía. «Se asustó mucho».
El letrado defensor del supuesto agresor sexual solicitó al tribunal la nulidad del reconocimiento fotográfico que una víctima hizo del sospechoso y que desencadenó el resto de actuaciones. La vista continuará el próximo martes con la declaración de más afectadas y del propio Patricio M., que se encuentra en prisión provisional desde 2022, cuando fue arrestado.
Una búsqueda incesante
La búsqueda de este agresor sexual trajo de cabeza a los Cuerpos y Fuerzas de seguridad del Estado en el arranque del otoño de 2022 después de que varias mujeres denunciaran ataques similares en la mota del río. El sospechoso, según recoge la Fiscalía en su escrito de conclusiones provisionales, amenazaba a mujeres con un cuchillo para agredirlas sexualmente. El acusado, de nacionalidad española, ya estaba plenamente identificado cuando los agentes de la Policía Local le dieron el alta en un control desplegado de madrugada en la pedanía murciana de Puebla de Soto. Quedó a cargo de los especialistas de la Unidad de Mujer y Familia (UFAM) que elevó a cinco la cifra de víctimas.
Según recoge la Fiscalía en su escrito de conclusiones provisionales el sospechoso llegó a violar a una de sus víctimas, a las que robaba además el teléfono móvil. El Ministerio Público le imputa un presunto delito de violación, cuatro de agresión sexual, cinco robos con violencia -dos de ellos con uso de arma- y tres delitos de lesiones.
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Enlace de origen : Una de las víctimas del presunto violador de la mota del río en Murcia: «Desde aquel día no he podido volver a salir sola con la bici»
