Predisposición a un buen final para Verdú en el Cartagena

El futbolista de 36 años no compite desde mayo de 2024, cuando con el equipo ya salvado matemáticamente las partes decidieron que era el momento de someterse a una operación en la rodilla, sanar las zonas afectadas y ganar así algo de tiempo a la pretemporada con el objetivo de volver a los terrenos de juego lo antes posible. Sin embargo, el proceso de recuperación se ha demorado más de lo esperado, el dolor no se va del todo y el manguero no ha conseguido sentirse en plenas condiciones para jugar. A la lesión en el menisco se le unió también un edema óseo.

Verdú puso y pone todo de su parte para recuperarse. Un ejemplo de ello es que la temporada pasada hizo de tripas corazón y no se lo pensó dos veces para infiltrarse, hizo lo imposible e incluso no llegó a cargar la rodilla durante toda la semana para jugar los fines de semana y contribuir así a la causa de la salvación en la segunda vuelta. Todo en perjuicio de su salud y en beneficio del equipo (rindió a muy buen nivel a las órdenes de Julián Calero).

El peaje a un gran sacrificio

El peaje de todo aquello es la situación actual que le impedirá, al menos a corto plazo, ayudar a un vestuario que necesita desde ya una reacción para no descender a las primeras de cambio. Desde el paso por el quirófano hasta la fecha el manguero se ha perdido treinta partidos, la gran mayoría de esta temporada, que el sábado (El Alcoraz, 18.30 horas) cumplirá la jornada número 24.

El manguero está sufriendo desde fuera por el Cartagena. Y desde dentro, en el día a día en la ciudad deportiva. Con el club está poniendo todo de su parte para buscar una solución que sea lo menos perjudicial posible para los intereses del equipo en estos momentos tan delicados. La predisposición de las partes es buena y, en este sentido, se ha estudiado hasta la posibilidad, mutuo acuerdo, de que Verdú ceda su ficha.

Este es uno de los temas candentes en la actualidad albinegra y que el propio presidente, Paco Belmonte, se ha comprometido a abordar previa consulta con el abogado del club Andrés López lo antes posible. Tampoco se descarta, llegado el caso, acordar una rescisión del contrato amistosa que no perjudique a ninguna de la partes. Verdú regresó a casa en el verano de 2023 después de una exitosa carrera en el Elche, con el que ascendió y se convirtió en el capitán general en Primera. Su salario, en este sentido, no es ni mucho menos de los más altos.

El sufrimiento, el dolor y la frustración de ver la sucesión de estos acontecimientos disparan los nervios de aficionados y jugadores. La sensación de que el proyecto se desmorona es compartida. La semana pasada unos y otros vivieron uno de esos momentos de tensión cuando unos chavales insultaron duramente a Verdú y este, que posteriormente pidió disculpas por las formas, respondió. El vídeo del momento corrió como la pólvora por las redes sociales.

Buenas palabras

La predisposición y conversaciones entre el manguero y el club son fluidas para llegar a buen puerto. Así lo transmitió el propio director deportivo del Cartagena, Manuel Sánchez Breis, al ser preguntado en la rueda de prensa de presentación del entrenador Guillermo Fernández Romo. «Es una situación especial porque viene desde el principio de temporada para ponerse en situación de ayudar al equipo. De momento no lo ha conseguido y no es un jugador más. Es como un estandarte para el club por la relación personal, por lo que significa para el club y para la ciudad. Lo que tengamos que hacer no puedo dar más información».

El boletín oficial del Registro Mercantil, en su sección primera, hizo ayer público el nombramiento de Aconsur como nuevo auditor del FC Cartagena. Este cambio confirma definitivamente la salida del club de BNFIX, empresa que en los últimos años se encargó de auditar las cuentas de la entidad albinegra; y en particular del economista Ramón Madrid, quien durante años fue una figura clave en los primeros años de la directiva y también en la salida total del concurso de acreedores a finales de 2022. De hecho esta persona ya no se encargó de preparar el documento con los últimos números actualizados del Efesé.

Ramón Madrid, clave

A través de Ramón Madrid y su vinculación con el Efesé aterrizó, en el verano de 2020, Rebeca García. La consultara murciana trabajó en BNFIX y en ese momento, dentro de una reestructuración e incorporación de nuevas personas al organigrama albinegro, con motivo del ascenso al fútbol profesional, asumió las riendas de la dirección general del Cartagena. García fue la mano derecha de Ramón Madrid para reconducir la situación del club en 2015 hasta que dejó el cargo en febrero de 2023 de mutua acuerdo con el presidente. Como directora general veló por lo concerniente a las relaciones con LaLiga y en temas como el control económico, la digitalización y RSC.

De ahora en adelante esa responsabilidad recae en Aconsur Auditores Consultores SLP. Esta empresa tiene tres años de antigüedad y el domicilio social en Ceutí. Entre sus socios figura Francisco Javier Vigueras Lorente. Esta persona también prestó sus servicios para el Real Murcia y en enero de 2024 participó en el Plan de Reestructuración que lleva a cabo la entidad grana para reducir de 11 millones de euros a 516.776 euros a pagar en tres años la deuda con acreedores privados.