Sánchez llama ante la Liga Árabe a «redoblar la presión» sobre Israel

Con esta propuesta, Sánchez pretende «redoblar la presión sobre Israel para parar la masacre en Gaza, en especial a través de las vías que da el derecho internacional», ha dicho durante su inédita intervención en la cumbre de la Liga de Estados Árabes, que reúne en Bagdad a los países de la región y a la que España ha acudido como invitada especial por primera vez.

«Palestina se desangra ante nuestros ojos y nada de lo que está ocurriendo en Gaza y Cisjordania puede ser ajeno a Europa y al resto del mundo», ha afirmado Sánchez, que ha exigido «el fin inmediato de la catástrofe humanitaria». La entrada de ayuda a la Franja está bloqueada por Israel desde el 2 de marzo, lo que ha puesto a cientos de miles de personas en riesgo de hambruna. El Ejecutivo de Netanyahu afirma que proseguirá con el cierre de la Franja hasta que Hamás libere a los rehenes que mantiene secuestrados.

Durante su discurso, Sánchez ha reiterado que la solución al conflicto de Oriente Próximo pasa por la solución de los dos Estados. «España reconoció el Estado de Palestina hace un año e insto a otros países a que hagan lo mismo», ha pedido el presidente del Gobierno.

Precisamente, el Ejecutivo considera que la invitación de la Liga Árabe supone un «gesto» hacia el liderazgo que España ha ejercido en el reconocimiento del Estado palestino y que pretende consolidar en dos próximas citas internacionales: la próxima reunión ministerial del Grupo de Madrid con países afines en favor de un Estado palestino, que tendrá lugar la semana que viene en la capital de España, y la conferencia de paz que se celebrará en junio en Nueva York y que tratará de relanzar la idea de los dos Estados.

Además, Sánchez ha advertido sobre «la tentación de redibujar el mapa de Oriente Próximo» porque «recuerda los peores fantasmas del pasado». «Frente a la violencia, defendemos un orden mundial donde prevalezca la justicia», ha apuntado el presidente español, que ha considerado «inaceptables» las cifras que ha dejado la ofensiva israelí en Gaza: 50.000 muertos, 100.000 heridos y dos millones de desplazados internos, según las fuentes palestinas. «No solo vulneran cualquier noción básica del principio de humanidad, sino que también violan los fundamentos básicos del Derecho Internacional y el Derecho Internacional Humanitario».

Las duras palabras del presidente contra Israel en Irak suponen un punto más en la tensión entre España y el Gobierno de Netanyahu. El jueves, Israel convocó a una «reunión de reprimenda» con la embajadora española en Tel Aviv, Ana Salomón Pérez, después de que el presidente afirmara que el Gobierno no comercia con un «Estado genocida».

En contraposición a las malas relaciones con Israel, Sánchez ha constatado un alto grado de entendimiento con los países árabes. En Bagdad ha mantenido encuentros bilaterales con el primer ministro de Irak, Mohamed Shia’ Al Sudani, con el primer ministro del Líbano, Nawaf Salam, y con el primer ministro de Jordania, Jafar Hassan. También se ha reunido con el presidente de Palestina, Mahmud Abbas, que ha agradecido a Sánchez «la postura valiente y de principios en apoyo al derecho inalienable del pueblo palestino a la autodeterminación y al establecimiento de su Estado independiente, con Jerusalén Este como su capital», según ha informado la agencia oficial de noticias palestina Wafa.