
Martes, 20 de mayo 2025, 17:52
Un buen profesor deja huella en los alumnos. Todo el que en un aula ha tenido la suerte de coincidir con un buen docente que da sus clases de una forma atractiva siente un cambio total por la materia que está aprendiendo. Incluso en las asignaturas que pueden resultar menos atractiva o se le dan peor al alumno, el cambio es significativo. Cuando se escucha a un profesor hablar y se percibe que realmente le apasiona lo que está intentando transmitir y lleva la clase bien preparada, el resultado es muy distinto.
Y no solo pasa en Primaria o en Secundaria, niveles en los que los alumnos son más influenciables o impresionables por su edad. En formaciones con alumnos más adultos, como sucede en la universidad, un buen profesor sigue marcando y dejando un recuerdo que puede durar años y décadas. No es raro que, hablando de la etapa académica, se cuenten anécdotas de profesores y de clases ocurridas muchos años atrás y que todavía están muy presentes en la memoria.
Un curioso homenaje
Una persona que parece evidente que ha dejado huella en sus alumnos es José Errasti. Este profesor de Psicología en la Universidad de Oviedo mostró en su perfil en la red social X, antes Twitter, el peculiar homenaje que le había hecho uno de sus alumnos. «Con estos calcetines se planta un alumno en clase el otro día. Luego dirán que este trabajo es aburrido», indicó el profesor en su mensaje. Los calcetines, en los que aparece una imagen con la cara del profesor, vienen además acompañados de una frase que debe repetir a menudo este docente: «No eres especial ni único».
Errasti recibió de inmediato numerosas interacciones con otros usuarios que le hacían preguntas sobre esta anécdota y comentarios de todo tipo. Un usuario le preguntó si le había aprobado, a lo que el profesor respondió «matrícula de honor. Sin necesidad de examen». Otra le comentó «cómo están las cabezas», con la divertida respuesta de Errasti indicando «y los pies». También recibió preguntas sobre cómo se dio cuenta de que los calcetines tenían ese diseño, ya que no es una parte muy visible normalmente. «Los llevaba puestos y me los enseñó motu ‘proprio grosso modo ad libitum’», dijo el docente.
Algunos usuarios también tuvieron mensajes al respecto de la frase citada en los calcetines: «Me parece lo mejor que se le puede decir a alguien joven para sacarle el narcisismo de encima». También hicieron referencia a un posible cambio de tendencia: «Se ha pasado de los tatuajes hechos por amor o necedad, a los calcetines serigrafiados con una foto de tu profesor favorito?».

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Enlace de origen : El divertido y original homenaje de un alumno a su profesor