La Región de Murcia es una de las comunidades con mayor incidencia de salmonelosis, y previsiblemente lo seguirá siendo este año después de que un brote masivo en el Hotel Cavanna de La Manga … haya dejado más de cien afectados. En 2021 y 2022, la Región registró la incidencia más elevada de toda España, y en 2023 solo se vio superada por Cantabria. De 2024 todavía no hay datos que permitan establecer una comparación entre comunidades.
El servicio de Epidemiología de la Consejería de Salud advirtió el año pasado en su informe sobre intoxicaciones alimentarias del «gran aumento de la incidencia de salmonelosis desde que comenzó la vigilancia de esta enfermedad en la Región». Si en 2021 se registraron 507 casos en la comunidad, en 2023 se batieron récords, con 1.077. En 2024 la cifra descendió hasta los 815 afectados.
La salmonelosis es una infección bacteriana que se produce por la ingesta de alimentos contaminados. Principalmente, huevos crudos o poco cocinados, o carnes poco hechas o incorrectamente conservadas.
En 2022, en la Región de Murcia «se llegó a superar en más del doble la cifra nacional [de incidencia], siendo la más alta de entre todas las comunidades». En concreto, en la Región se detectaron 51,46 casos por 100.000 habitantes, mientras la media nacional se situó en 24,97. En 2023, fue Cantabria la que lideró la incidencia, con 72,23 afectados por 100.000, seguida de la Región de Murcia (65,39).
Epidemiología achaca en parte el incremento de casos a las mejoras en la notificación y registro de enfermedades de declaración obligatoria. La puesta en marcha de un sistema de información microbiológica permite desde 2020 un volcado automatizado de todos los casos para su registro. «Sin embargo, estos hechos no bastan para explicar las diferencias con otras comunidades que habitualmente notifican por encima de la media nacional, como Navarra, que en 2022 alcanzó una incidencia 20 puntos por debajo de la registrada en la Región de Murcia», aclara Epidemiología.

Lavar adecuadamente las frutas y hortalizas que se vayan a consumir crudas.
Mantener una adecuada higiene de manos antes de manipular los alimentos, así como limpiar bien las superficies.
Respetar las fechas de caducidad de los alimentos.
No descongelar los alimentos a temperatura ambiente, sino hacerlo en la nevera con antelación suficiente o en el microondas.
Vigilar las condiciones de higiene de los alimentos en el momento de la compra.
Guardar los alimentos sobrantes en el frigo en las primeras 2 horas tras su preparación y consumir en 3 o 4 días.
No interrumpir la cadena de frío y seguir las recomendaciones de refrigeración y conservación de alimentos.
Asegurar la cocción adecuada de las carnes y embutidos.
Evitar la contaminación cruzada, lavando bien los utensilios tras manipular alimentos crudos antes de volver a utilizarlos.
Rechazar los envases abombados, oxidados o deteriorados.

Lavar adecuadamente las frutas y hortalizas que se vayan a consumir crudas.
Mantener una adecuada higiene de manos antes de manipular los alimentos, así como limpiar bien las superficies.
Respetar las fechas de caducidad de los alimentos.
No descongelar los alimentos a temperatura ambiente, sino hacerlo en la nevera con antelación suficiente o en el microondas.
Vigilar las condiciones de higiene de los alimentos en el momento de la compra.
No interrumpir la cadena de frío y seguir las recomendaciones de refrigeración y conservación de alimentos.
Guardar los alimentos sobrantes en el frigo en las primeras 2 horas tras su preparación y consumir en 3 o 4 días.
Asegurar la cocción adecuada de las carnes y embutidos.
Evitar la contaminación cruzada, lavando bien los utensilios tras manipular alimentos crudos antes de volver a utilizarlos.
Rechazar los envases abombados, oxidados o deteriorados.

Guardar los alimentos sobrantes en el frigo en las primeras 2 horas tras su preparación y consumir en 3 o 4 días.
Lavar adecuadamente las frutas y hortalizas que se vayan a consumir crudas.
Mantener una adecuada higiene de manos antes de manipular los alimentos, así como limpiar bien las superficies.
No interrumpir la cadena de frío y seguir las recomendaciones de refrigeración y conservación de alimentos.
Asegurar la cocción adecuada de las carnes y embutidos.
Respetar las fechas de caducidad de los alimentos.
No descongelar los alimentos a temperatura ambiente, sino hacerlo en la nevera con antelación suficiente o en el microondas.
Evitar la contaminación cruzada, lavando bien los utensilios tras manipular alimentos crudos antes de volver a utilizarlos.
Vigilar las condiciones de higiene de los alimentos en el momento de la compra.
Rechazar los envases abombados, oxidados o deteriorados.
«Una investigación específica»
El informe avisa de que «es posible que existan factores intrínsecos a la Región de Murcia que, dadas unas capacidades similares entre sistemas de vigilancia autonómicos, puedan contribuir a que en esta se alcance una incidencia sustancialmente mayor». Fundamentalmente, se apunta al clima. Los registros confirman que «hay una clara estacionalidad en torno a los meses de mayores temperaturas». La bacteria se multiplica a partir de los 35 a 37 grados.
Pero los epidemiólogos añaden que «no obstante, es probable la existencia de factores adicionales que influyen sobre este fenómeno, si bien su identificación requiere de una investigación específica».
Para la vicepresidenta de la Sociedad de Medicina Preventiva de la Región de Murcia, Shirley Pérez, los datos evidencian la necesidad de «trabajar más en la prevención, haciendo más énfasis en la educación sanitaria y reforzando los mensajes de cara al verano». Las condiciones climatológicas «no favorecen a la Región de Murcia», y esto hay que tenerlo en cuenta a la hora de afrontar las intoxicaciones alimentarias.
«El calor del verano multiplica el riesgo, ya que las bacterias se reproducen más rápido» en esta época del año «si los alimentos no se conservan bien», recuerda la médico preventivista. Pero, además, el cambio climático está abocando a la Región de Murcia a veranos más largos y con olas de calor más prolongadas y extremas.
Pese al impacto que tienen brotes tan masivos como el del Hotel Cavanna, la mayoría de intoxicaciones se producen en el propio hogar. Shirley Pérez recuerda que la salmonela «es fácil de evitar» siguiendo una serie de consejos: «Lavarse las manos antes de cocinar y después de tocar carne cruda o huevos, cocinar bien los alimentos y lavar frutas y verduras antes de comerlas». También «separar los alimentos crudos de los cocinados», evitando contaminación cruzada, y usar «utensilios distintos para carne y vegetales» o desinfectarlos bien antes de reutilizarlos.
La higiene es un aspecto fundamental para prevenir no solo salmonelosis, sino también otras intoxicaciones alimentarias. La más común, de hecho, no es la salmonela, sino la campilobacteriosis, provocada por otra bacteria que causa también diarrea, dolor abdominal, fiebre y malestar general. El año pasado se registraron 1.008 casos de campilobacteriosis en la Región de Murcia.

Soy William Abrego, me uní como ejecutivo de SEO y me abrí camino hasta el puesto de Gerente Asociado de Marketing Digital en 5 años en Prudour Pvt. Ltd. Tengo un conocimiento profundo de SEO en la página y fuera de la página, así como herramientas de marketing de contenido y diferentes estrategias de SEO para promover informes de investigación de mercado y monitorear el tráfico del sitio web, los resultados de búsqueda y el desarrollo de estrategias. Creo que soy el candidato adecuado para este perfil ya que tengo las habilidades y experiencia requeridas.
Enlace de origen : La Región de Murcia se sitúa desde 2021 a la cabeza de la incidencia de salmonelosis en España