Milagro navideño del Hozono Jairis para vencer 72-77 en Estepona y acariciar la Copa

Un final feliz en la Costa del Sol este domingo para el Hozono Jairis, que, sin embargo, lo llegó a ver muy negro. Como siempre, apareció quien tenía que aparecer, una Aina Ayuso que anotó 14 de sus 18 puntos en el último cuarto y 8 de ellos en los últimos dos minutos, a los que su equipo entró con una desventaja de seis tantos, la mayor del partido (72-66). La catalana, no solo un seguro de vida en el tiro libre, asumió galones para hacer jugar cerebral a un equipo torpe por muchos momentos del encuentro, y ser el valor diferencial de un final con las emociones a flor de piel, también para un equipo local que rozó ganar dos partidos seguidos por primera vez esta temporada, y al que le falló la muñeca en varios tiros abiertos después de, en fases anteriores, haber visto el aro como una piscina.

Ekh, un lujo

Cuesta arriba se le puso a las de Canut el partido, pero este comenzó siendo totalmente aurinegro. Al salto inicial le sucedió un parcial de 0-10 en una ventaja hecha aún más grande cuando, después del tiempo muerto de Aneas, Ekh metía su tercer triple sin fallo del partido (2-13, minuto 4). La ala-pívot sueca se postula como esa pieza que le faltaba al Jairis, al que le llegaban de inmediato las primeras dificultades con el juego al poste bajo de Dongue, que metía 12 puntos en un primer cuarto que pronto pasó a ser de tú a tú y en el que, hasta la última bandeja de Prieto, todas las canastas visitantes llegaron con tiros de media y larga distancia (17-19).

Pero, si tiene un problema continuado Canut esta temporada, es en dar con la tecla con su segunda unidad. A su equipo le cuesta mucho encadenar buenos tramos de juego reconocible, con Mataix y Prieto todavía no adaptadas a un rol menos protagonista que en sus anteriores equipos, y, obcecado en jugar por dentro con una Vonleh apática, que el Estepona pudiera correr abrió muchos espacios en defensa para un bombardeo de cuatro triples seguidos de las malagueñas (33-29, minuto 17), por delante al descanso (39-38).

A contracorriente

La máxima de seis puntos con que entraron las de César Aneas a los dos últimos minutos era la tercera vez que estas la conseguían. La primera fue pasado el ecuador de un tercer cuarto al que el Jairis entró sin corregir sus errores de la primera parte. Ayuso se desesperaba con los fallos cerca del aro de Vonleh, irreconocible, pero la defensa del Estepona, que encimaba mucho pasada la media pista, complicaba la puesta alcantarillera del balón en el poste bajo, fundamental en sus esquemas. A raíz de una rigurosa antideportiva llegaba el parcial con que el Estepona empezaba a poner tierra de por medio (51-45, minuto 27). Sacando el orgullo defensivo, un quinteto de más garra seguía sin fluir en ataque, pero se mantenía en el partido (54-53, final del tercer cuarto).

Fueron varias las veces que el Jairis tuvo que ganar el partido. Y es que la segunda vez que llegó esa máxima fue ya en el último cuarto, cuando la aparición de varias jugadoras salvó a las de Canut. Mosqueda-Lewis, gris hasta entonces, anotaba un difícil triple, y dos buenas defensas seguidas permitían correr a Ayuso, que le daba la vuelta en un parcial de 0-9 terminado por Massey (61-64, minuto 35).

Después de tanto sufrir, el Hozono Jairis andaba nervioso. Koné había empatado nada más salir de tiempo muerto con un triple, se reclamaban contactos no sancionados y, además, caía una técnica por pedir una antideportiva sin razón. Para colmo de males había un campo atrás, y un triple de Garrick a 2:17 del final hacía mucho daño (71-66). Después de tiempo muerto, el Jairis no anotaba y Contell ponía, con un tiro libre, la máxima por tercera vez (72-66, minuto 39).

El ‘Ayushow’

Fue cuando la capitana cambió el signo del partido. Anotó un costa a costa en transición y, después de un fallo local, asistió al último triple de Ekh (72-71, 1:02). Asumió el balón contra un equipo malagueño que presionaba mucho y su sangre fría le dio la vuelta (72-73, 40 segundos) después de capturar un rebote a otro tiro abierto del Estepona que iba fuera. En la siguiente, Dongue cometía pasos y medio partido estaba en el bolsillo, con otro medio llegando por otros dos tiros libres de Ayuso (75-72, 9,6 segundos). Se la jugó Canut a defender y no hacer falta para evitar el triple y, producto de una buena defensa, las malagueñas pisaban fuera.

Con dos jornadas más de primera vuelta por jugar, Tarragona cuenta con el vigente campeón de la Copa de la Reina.