El auditor urge a aprobar y depositar las cuentas del Efesé antes del 25 de enero

Vigueras se ha limitado única y exclusivamente a cumplir con su trabajo, que no es otro que auditar las cuentas de la SAD albinegra y ponerlas a disposición del consejo de administración formado por Belmonte, su hermano Mariano y Manuel Sánchez Breis, quedando al margen de las negociaciones que llevan entre manos el actual presidente del Cartagena y el exfutbolista madrileño desde hace ya seis meses. Este profesional, según confirmó este martes LA VERDAD, envió a principios de la semana pasada un borrador y un informe de valoración a las partes. En el mismo se detalla la situación económica de la SAD albinegra a 30 junio, el estado de cuentas, de pérdidas, de ganancias y de liquidez, así como de las deudas a corto y largo plazo y posibles préstamos que queden por asumir.

Arribas entiende que debe conocer con detalle esa situación financiera antes de dar los siguientes pasos para controlar el 100% del club. Conocer exactamente el terreno que pisa y en qué estado se encuentra la SAD. Fuentes de la negociación consultadas por este diario, en cualquier caso, aseguraron que esta no es la forma habitual de proceder cuando una sociedad, en este caso Cortadone Inversiones SL, pretende comprar un equipo de fútbol. Arribas primero cerró un acuerdo de compra y luego ha esperado a conocer la auditoría del propio club, en lugar de contratar una externa por su cuenta antes de dar más pasos. Además, antes de saber lo que debía el Efesé, se expuso públicamente ante los medios, depositó supuestamente cerca de dos millones de euros y se reunió con la alcaldesa Noelia Arroyo.

A la espera de que Belmonte dé una respuesta a Vigueras como presidente del consejo de administración, el auditor sí ha querido dejar claro a las partes que no se demoren demasiado en analizar el borrador porque urge aprobar las cuentas y depositarlas cuanto antes en el Registro Mercantil para evitar posibles sanciones. En principio deberían quedar depositadas en el plazo de seis meses después del cierre del ejercicio de la temporada 2024/25; es decir, del 30 de junio hasta hoy 31 de diciembre. El auditor ha hecho hincapié a Belmonte y Arribas en que este asunto no se demore mucho más allá de quince o veinte días y nunca más tarde del 25 de enero.

Con esto, Vigueras no lanza un ultimátum ni una advertencia, pero sí ha reiterado a las partes que es conveniente zanjar lo antes posible este asunto para no salirse de los plazos mercantiles de aprobación y depósito de cuentas y evitar que todo se solape con el pago de impuesto de sociedades. En el caso del Efesé este pago debe afrontarse en los primeros 25 días naturales a contar desde hoy, cierre de los seis meses del ejercicio 2024/25. De lo contrario existe el riesgo de acarrear una sanción administrativa, como por ejemplo una multa económica.

El borrador entregado a las partes incluye no solo un balance de cuentas y de contabilidad, sino también el propio informe valorativo de Vigueras. El auditor tenía el trabajo bastante encauzado antes del partido contra el Torremolinos y finalmente lo entregó a principios de la semana pasada, tal y como estaba previsto. El margen ya es mínimo y las fuentes consultadas entienden que todo esto no debe estirarse mucho más, porque ni el club puede continuar con esta parálisis institucional, algo que ya reclaman hasta los futbolistas del primer equipo; ni tampoco es conveniente con la apertura del mercado de fichaje de enero a la vuelta de la esquina.

Ya en la fotografía del 30 de junio de 2024, Vigueras fue bastante directo en la valoración de la situación financiera al apreciar «dudas significativas sobre la capacidad de la sociedad para continuar como empresa en funcionamiento». Vigueras basó esta afirmación en patrones como el ratio de liquidez, el rumbo deportivo, el margen de maniobra para afrontar pagos y la deuda neta, disparada hasta los 8,4 millones de euros. Belmonte sabe que ya no hay vuelta atrás porque hace dos meses que los otros tres responsables del área deportiva, Breis, Sívori y César Remón, se marcharon, desaparecieron del día a día y no van a volver. Él sabe que solo no puede seguir.