Los trucos caseros fáciles y baratos para acabar con las manchas de desodorante en la ropa

Todos los días sueles utilizar desodorante antes de salir de casa, pero lo que muchas veces no tienes en cuenta es que en algunas prendas deja
manchas. Este tipo de productos se componen de sustancias grasientas, las cuales quedan adheridas a tu ropa. En ocasiones, resulta muy desagradable ir a ponerte una prenda y que tenga una mancha en la zona de la axila. Esto suele pasar a las prendas blancas o de color, ya que son más propensas a quedarse fijados en los tejidos.

Si tienes este problema y más de una prenda de tu armario tiene una mancha de desodorante, puedes seguir una serie de trucos para evitar que tu ropa se manche y para saber
quitar las manchas de tus prendas. Los desodorantes contienen ingredientes como aluminio o circonio que, al entrar en contacto con el sudor, se dolidifican y dan lugar a estas manchas de color blanco o amarillas en la zona de las axilas de las prendas. Este tipo de ingredientes acaba con la limpieza de tus prendas.

Antes de conocer una serie de trucos para acabar con las manchas de desodorante, no debes olvidar una serie de consejos para evitar que se produzcan este tipo de manchas:

– Si ves manchas de desodorante en la ropa, lávala lo antes posible. Cuanto más tiempo esperes, más se fijará la marca en la prenda.

– Antes de lavar la ropa, déjala remojando en un producto quitamanchas.

– Para evitar la aparición de nuevas manchas, espera a que el desodorante se seque antes de vestirte.

– No utilices más desodorante del necesario, puede acumularse y facilitar la creación de estas marcas.

Trucos para eliminar las manchas de desodorante

1. Utiliza sal y vinagre blanco. Debes colocar tres cuartos de taza de sal marina en un recipiente, una taza de vinagre blanco y una de agua caliente. Después, añade media cucharada de jabón líquido para lavar la ropa. Sumerge la prenda en la mezcla y déjala en remojo durante tres o cuatro horas. Por último, enjuaga y lava como de costumbre en tu lavadora.

2. Zumo de limón. Aplica zumo de limón directamente sobre la zona afectada. Tras la aplicación, espera al menos 10 minutos antes de frotar la mancha. A continuación, lava la prenda como haces normalmente.

3. Utiliza bicarbonato de sodio. Crea una especie de pasta a base de bicarbonato de sodio y agua. Aplícala directamente sobre la mancha. El tiempo de reposo varía en función de si la mancha es más reciente o lleva tiempo en la prenda. Si la mancha es muy amarilla, deja que el bicarbonato se seque sobre la mancha. Después, humedece la zona y frota hasta que la suciedad desaparezca. Por último, lava la prenda por completo con jabón para la ropa.