El anestesista que participó en la liposucción a Sara Gómez «no tenía concedida la compatibilidad» para estar aquel 2 de diciembre de 2021 en el quirófano del Hospital Virgen de la Caridad del que la joven de Alcantarilla salió en estado crítico, tras una intervención llena de presuntas negligencias. Así lo ha dictaminado el Servicio Murciano de Salud (SMS) en una resolución del pasado 17 de julio que impone al profesional una suspensión de nueve meses de empleo y sueldo por «falta grave». La sanción no es firme: aún cabe recurso de alzada ante el consejero de salud y, previsiblemente, la vía judicial.
La resolución, a la que ha tenido acceso LA VERDAD, responde a la denuncia formulada en su día por la familia de Sara Gómez. En ausencia de director gerente en el SMS, es el secretario general de la Consejería, Andrés Torrente, quien firma el documento. El Servicio Murciano de Salud concluye que la actuación del anestesista en la intervención quirúrgica que acabó con la vida de la joven de Alcantarilla «no estaba amparada por autorización de compatibilidad». Si bien el sanitario había pedido dicha compatibilidad en 2011, no volvió a solicitarla cuando, en 2019, fue nombrado jefe de sección en el Hospital Los Arcos. Es decir, «no tenía concedida la compatibilidad para el puesto de jefe de sección».
De hecho, el propio SMS requirió de oficio al profesional que actualizase su declaración de compatibilidad en julio de 2022, después de que la familia de Sara Gómez interpusiese la reclamación. Actualmente, y tras cumplir con este trámite, el anestesista sí dispone de autorización para la actividad privada.
Los hechos son «constitutivos de falta grave», según marca la Ley del Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios de salud, advierte la resolución. El SMS considera «acreditada la antijuricidad e imputabilidad» de la actuación denunciada, «así como el quebrantamiento del deber de solicitar la actualización de su compatibilidad para el ejercicio privado de la medicina al acceder al puesto de jefe de sección». Además, el SMS destaca «la naturaleza de los perjuicios causados y el daño al interés público» generado. En este sentido, recuerda «la gran repercusión que tiene en todos los medios de comunicación» el «luctuoso fallecimiento de Doña Sara Gómez».
Con todo, el SMS reduce sustancialmente la sanción que había propuesto la instructora del expediente disciplinario: 2 años de suspensión de funciones por falta muy grave más otros 3 meses por falta grave. En concreto, la instructora acudía al artículo 72.2 de la Ley del Estatuto Marco, que tipifica como falta muy grave «el incumplimiento de las normas sobre incompatibilidades, cuando suponga el mantenimiento de una situación de incompatibilidad». La resolución del SMS «discrepa» de esta calificación, al considerar que, para ser falta muy grave, la actividad desarrollada por el anestesista debería haber sido «abiertamente incompatible». Es decir, debería haber una «imposibilidad de autorización de compatibilidad». No es el caso, subraya la resolución, ya que el profesional sí ha sido autorizado posteriormente para compaginar su puesto con la actividad privada.
«Era práctica habitual en todo el SMS»
La resolución incluye las alegaciones presentadas por el anestesista, que han sido rechazadas. El profesional subraya que cuando en 2019 fue nombrado jefe de sección por comisión de servicios, no se le requirió nueva solicitud de compatibilidad «para el desempeño» de esta jefatura, «que se realizaba en las mismas condiciones de jornada y horarios que el puesto base de facultativo especialista sanitario». Además, en sus nóminas pasó a figurar como «jefe de sección facultativo compatible». El SMS responde a esta alegación que esta indicación «hace referencia a que el puesto es compatible, no a que el mismo se ha compatibilizado» mediante previa solicitud.
El profesional insiste en que «en ningún caso» se requirió «a los facultativos que desempeñaban su puesto con resolución de compatibilidad que volvieran a solicitarla cuando pasaban a desempeñar el puesto de jefe de sección, al no cambiar las condiciones de prestación de servicios respeto a jornada y horarios». En este sentido, el anestesista advierte de que «era práctica habitual en todo el SMS no requerir nueva solicitud de compatibilidad» en estos casos.
Sin embargo, el SMS señala que en la autorización concedida en 2011, antes del nombramiento como jefe de sección, se recordaba que «esta compatibilidad quedará automáticamente sin efecto» cuando «el interesado cambie de puesto en el sector público».
La familia de Sara: «Estamos totalmente insatisfechos»
La familia de Sara Gómez considera insuficiente la sanción impuesta. «Estamos totalmente insatisfechos; consideramos que la sanción debe ser, tal y como pidió la instructora, de dos años por falta muy grave», subraya Rubén Gómez, el hermano de Sara. «Se ha omitido que nosotros presentamos nuevas denuncias con otras víctimas de años anteriores que demuestran que hubo reincidencia temporal en esta conducta» de incompatibilidad, señala. La familia quiere demostrar que «el grave problema de la compatibilidad afectó» al «trato médico» a Sara, «y ello explica las tres largas horas que fue prácticamente abandonada en el Virgen de la Caridad». La resolución del SMS no entra a valorar ni a analizar la actuación del profesional durante la intervención, ya que no es objeto de la instrucción. Las presuntas negligencias que se produjeron en la cirugía están bajo investigación judicial. El anestesista defendió ante la juez que instruye el caso que instó al cirujano a parar la operación.
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Enlace de origen : El SMS concluye que el anestesista que intervino a Sara Gómez incurrió en «falta grave» por no tener la compatibilidad
