‘Conexión Belgrado’ en el UCAM

Un torneo sin anfitrión como ya se sabía teniendo en cuartos de final a tres españoles, dos griegos, dos alemanes y un turco. Es más, ni uno de los 32 equipos que empezaron la temporada en octubre es de Serbia. Difícil creer así en el arraigo y atractivo de la Champions League para los aficionados de este país, ni siquiera en uno que respira baloncesto por los cuatro costados.

Así pues, la utopía de llenar el Stark Arena, con capacidad para cerca de 20.000 espectadores, está más que descartada. La dificultad de desplazamientos con el país balcánico para los equipos españoles que en esta ‘Final Four’ participan (UCAM, Unicaja y Tenerife) hará que entre los tres ni se acerquen al millar de aficionados desplazados, pues entre los 200 y los 250 aficionados se estiman para cada uno. Sí se esperan cerca de 1.000 por parte del Peristeri, equipo de Atenas, cuya ciudad cuenta con entre uno y tres vuelos directos diarios a Belgrado, de solo una hora y media de duración.

Pero la afición del UCAM quiere hacer sentir su aliento incluso a miles de kilómetros de Murcia, y por eso ayer, en la partida del viaje de la expedición universitaria, un numeroso grupo de aficionados se dieron cita en el Palacio para desear suerte a sus héroes, que anoche durmieron en Madrid y esta mañana ya han volado a la capital serbia.

El que mejor conoce Belgrado

Al menos entre los equipos españoles, el papel de anfitrión queda libre. Ninguno se podrá ni acercar a los griegos en las gradas, pero el UCAM es el equipo que cuenta con más pedigrí balcánico: tiene un trío de montenegrinos en Nemanja Radovic, Marko Todorovic y el entrenador Blagota Sekulic; además del nacionalizado Jonah Radebaugh, y Dylan Ennis también es serbio en su pasaporte.

Todos ellos, menos Todorovic y Radebaugh, jugaron en algún momento de sus carreras en Belgrado, como también lo hizo Rodions Kurucs en su retorno de la NBA. Y es por eso que Radovic considera que «estamos en nuestro terreno».

Una ciudad dividida mayormente por la rivalidad entre el Partizán, donde jugaron Kurucs y Sekulic, y el Estrella Roja, donde lo hizo Ennis. Este último, tirando de su faceta de ‘influencer’, ha convocado a los fans de su exequipo para animar a los murcianos. «Van a responder, seguro», dice el carismático escolta, para el que la masa social de los rojiblancos es «una de las mejores de Europa, junto a la de Murcia», dice riéndose antes de admitir que «¡tenía que decirlo!». «Si veo aunque sea a unos pocos aficionados del Estrella Roja animándonos, significará mucho», dice ya más serio.

Allí llegó Ennis previo paso por el Mega Bemax, donde también jugó en los inicios de su carrera Nemanja Radovic. Ambos conocen bien Belgrado. Radovic es el mejor guía turístico de la plantilla del UCAM en Belgrado.

Muchas son las recomendaciones del capitán universitario para los murcianos desplazados, a los que anima a visitar «el centro histórico» y, por supuesto, «el Kalemegdan, un castillo enorme y muy bonito». Todo depende, como bien sabe Radovic, «del tiempo que se tenga», pero él recomienda y cada cual que se organice. «En Belgrado está la iglesia ortodoxa más grande de los Balcanes», el Templo de San Sava.

Con un partido el viernes y otro el domingo, no solo habrá espacio para el turismo, también para la diversión. Para quien quiera probar la cocina tradicional serbia, Radovic escogería darse una vuelta, «especialmente por la noche», por «la calle Skadarlija, donde también hay siempre música del país», un lugar que cuenta con tabernas previas a la Segunda Guerra Mundial.