«Mi corto no repudia al Mar Menor»

«Mi corto no repudia al Mar Menor»

Jueves, 10 de octubre 2024, 00:34

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Medio comedia romántica, medio ‘thriller’ con un inesperado soplo de fantasía, según describe en dos brochazos el corto ‘Los chicos del mar’; su propio creador, el cineasta José Antonio Valera. «Intenté que fuera un corto bastante vintage, típico de autocine americano, un poco ‘Stranger things’, algo de Guillermo del Toro y a la vez del cine italiano a lo ‘Call me by your name’. Un cóctel de muchas cosas, pero con una apuesta potente a nivel estético», apunta sus referencias el creador de Bullas.

Para componer esta historia de amor con desenlace inesperado, Valera ha contado con el actor Víctor Palmero, conocido por su papel de Alba Recio en ‘La que se avecina’, Daniel Cabrera (‘Amar es para siempre’), Eduardo de Rodas y la veterana actriz valenciana Empar Ferrer (‘El tiempo entre costuras’, ‘Aquí no hay quien viva’, entre otros trabajos).



La preocupación ambiental y la temática LGTBI impregnan la cinta, que se proyecta el viernes, 11 de octubre, en el espacio cultural La higuera de la poca vergüenza, de San Pedro del Pinatar. Ya se estrenó en Murcia y en el Festival de Cine de Hof (Alemania), donde no son ajenos a la crisis ambiental del Mar Menor, que se cuela en el corto. De hecho, Valera no sabe qué puede causar más incomodidad en algunos círculos, si la relación amorosa entre tres jóvenes que viven su sexualidad sin tapujos o la crítica al maltrato a la laguna murciana, donde se rodó el corto. El comentario sobre el Mar Menor que hace uno de los tres protagonistas –«está todo asqueroso, me da una pena», dice el personaje de Sergio a bordo de un barco pesquero– ha levantado más de una ampolla antes del estreno en el municipio. De momento, el Ayuntamiento de San Pedro del Pinatar ha retirado su apoyo inicial a la presentación y ningún representante del Gobierno local acudirá a la proyección.

«Todos deberíamos pensar en cómo protegemos los espacios naturales», dice Valera, que rodó en un barco

La Cofradía de Pescadores ha facilitado al equipo de Valera el rodaje en la lonja y a bordo de una embarcación, a través del Museo del Mar, cuyo director, Benito Pérez, defiende «este tipo de cine que nos invita a reflexionar, promueve el arte y nos conecta con nuestra naturaleza y las emociones más profundas». Para Valera, «en el corto se incluye una crítica sobre la contaminación, pero no deja de ser un entorno maravilloso». El cineasta gestó la historia «durante estancias en San Pedro del Pinatar, donde tengo amigos». «Escuché a alguien decir que el Mar Menor está tan contaminado que puedes salir con tres brazos y surgió la idea de ese hecho mágico». Sin desvelar ese misterio fantástico de la historia, destaca «el trabajo de maquillaje con Víctor Palmero. Llevaba tres horas convertirlo en el monstruo».


Los protagonistas del corto con temática LGTBI ‘Los chicos del mar’.


A. G.


Le preocupa el deterioro ambiental de la laguna, igual que «la masificación que tenemos en Bullas en el río. No soy Greta Thunberg, pero todos deberíamos pensar en cómo protegemos los espacios naturales». Rodar a bordo de un barco fue fácil en el Mar Menor, cuya calma lo convierte «en un plató», afirma Valera. «El corto no lo repudia, pero hay que luchar por que sea algo limpio, y me refiero sobre todo a la conducta que todos tenemos en el mar, cuando arrojamos plástico y suciedad».

Valora sobre todo «eso tan especial que tiene Murcia y los municipios de mar, que es la calidad de la luz». Recuerda el impacto que causaron los amaneceres y las puestas de sol en los miembros del equipo durante el rodaje. «Murcia es un plató natural increíble», afirma.

Con Bárbara Rey

No es la primera trama de temática LGTBI que rueda y asegura que huye de encasillarse, pero cree que estas historias «siguen incomodando». «En otras proyecciones, ha habido gente que se la levantado», asegura el director y productor. Critica que «lo LGTBI no molesta si los protagonistas son atractivos y no muy explícitos, aunque yo tiendo a pasarme».



Con una serie ya en Filmin –’Ya era hora’–, Valera trabaja actualmente en Madrid en la grabación de algunos proyectos publicitarios mientras prepara un montaje teatral y algunas producciones independientes.

Como anécdota, recuerda cuando dirigió a Bárbara Rey en ‘Las cosas absurdas que pensamos y no decimos’, un corto que describe como «surrealista y complejo». A la actriz totanera, que ha vuelto esta semana a la primera fila de la actualidad por su relación con el rey emérito, la recuerda «muy humilde trabajando y muy divertida».

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